martes, 5 de abril de 2016

Pan de molde integral con semillas (+ truco para conservarlo durante semanas)

 ¡Buenas! Hoy os traemos una receta estupenda para que podáis hacer en casa vuestro propio pan de molde tierno y esponjoso y, lo mejor de todo, el truco para conservarlo durante semanas como el primer día.
 
Nosotras hemos utilizado una parte de la harina integral, pero podéis hacerlo con harina común únicamente si lo preferís. También le hemos añadido semillas y copos de avena (y pipas, la primera vez que lo hicimos) aunque, podéis ponerle cualquier otra cosa, o nada si así lo queréis. De cualquier forma, seguro que está riquísimo.
 
Es la misma masa que utilizamos para hacer los bollitos preñaos, para los panes de hamburguesa y también, muchas veces, para la pizza...¡y es que sirve para todo!, comprobado :). Se prepara en 5 minutos (aunque luego necesitaremos tiempo para el levado) y sólo necesita 30 minutos de horno. Y tendremos un pan de molde casero, sin conservantes, ni colorantes ni nada por el estilo.
 
Os dejamos con la receta y, al final, ¡truco!
 
Ingredientes (para 1 pan):
 
- 250 g. de harina blanca
- 250 g. de harina integral
- 2 cucharaditas de sal
- 200 ml. de agua tibia
- 25 g. de levadura fresca (ó 8,5 g. de levadura seca de panadería)
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- 2 huevos + 1 extra para pintar
- 1 puñado de copos de avena
- 1 puñado de semillas (sésamo, lino, pipas...)
 
¿Cómo lo hacemos?:
 
Ponemos en un bol pequeño el agua y disolvemos en ella la levadura. Reservamos durante 5 minutos.
 
Ponemos en un bol amplio las harinas, la sal, los copos de avena y la semilla. Mezclamos bien y reservamos.
 
Añadimos al bol con el agua y la levadura, los huevos y el aceite y mezclamos muy bien con un tenedor. Vertemos sobre mezcla de harinas y semillas y removemos con un tenedor o una cuchara de madera hasta que podamos trabajar con las manos (quedará una masa bastante consistente). Amasamos durante unos 4-5 minutos, damos forma de bola a la masa y la dejamos reposar en un lugar cálido, cubierta con un paño limpio, durante 1 hora.
 
Pasado este tiempo, quitamos el aire a la masa, formamos una bola de nuevo y la cortamos en 4 trozos iguales. Hacemos una bolita con cada trozo y las colocamos, unas junto a otras, en nuestro molde (previamente cubierto con papel antiadherente y engrasado con un poco de aceite). Cubrimos de nuevo y dejamos reposar 1 hora más.

Pasado este tiempo, pintamos la superficie con el huevo batido y metemos al horno precalentado (importante) a 200ºC, en la parte baja del horno, durante 30-35 minutos (podemos pinchar en el centro para comprobar si ya sale limpio).
 
Sacamos del horno y dejamos enfriar un poco ante de desmoldar. Dejamos enfriar completamente antes de cortar, ¡y listo!.
 
Y ahora, el truco :). Para tener pan como nuevo durante semanas, sólo tenéis que cortarlo en rebanadas (siempre con un cuchillo de sierra), guardarlo dentro de una bolsa de plástico y ¡al congelador! Cuando os apetezca una tostada, sólo tenéis que coger la rebana y meterla en la tostadora (directamente del congelador) y ¡estará como recién hecha!. Yo la suelo meter un par de veces porque me gusta que quede doradita pero, con una vez es suficiente. El truco se lo copiamos a Isasaweis y, la verdad es que funciona muy bien.