jueves, 7 de mayo de 2015

Bagels clásicos

¡Hola! Después de un tiempo sin pasarnos por aquí, os traemos una receta que tenía pendiente desde hace mucho. Nunca ante shabía hecho bagels pero, a partir de ahora los haremos muchas más veces.
 
 
Nos han gustado mucho. Son panecillos de miga densa, ligeramente crujientes por fuera a los que, normalmente, se le añaden semillas o hierbas aromáticas por encima. Son muy fáciles de preparar (la masa no se pega para NADA a las manos) aunque, como con todas las masas, necesitan un poco de tiempo para que reposen y leven bien.
 
 
Esperamos que os guste y no dudéis en hacerlos. Los podéis rellenar con ingredientes dulces o salados, con mil combinaciones diferentes...así que son ideales tanto para el desayuno, como para la merienda o una cena diferente.
 
Ingredientes (para 10 bagels):
 
- 600 g. de harina
- 2 cucharaditas de sal
- 2 cucharaditas de azúcar
- 2 cucharaditas levadura seca de panadería
- 1 cucharada de aceite de girasol (o de oliva en su defecto)
- 300 ml. de agua tibia
- semillas y hierbas aromáticas al gusto para decorar
 
¿Cómo lo hacemos?
 
Ponemos en un bol amplio la harina, la sal y el azúcar. Mezclamos y reservamos. Ponemos en otro cuenco el agua tibia y el aceite, añadimos la levadura y dejamos reposar durante 5 minutos.
 
Añadimos el agua con la levadura y el aceite al bol de la harina. Removemos con una cuchara hasta que podamos trabajar con las manos. Ponemos la masa en la mesa y amasamos hasta que toda la harina esté bien incorporada.
 
Formamos una bola y la ponemos en un bol engrasado con aceite. Cubrimos con papel film y dejamos reposar durante 1 hora aproximadamente (o hasta que haya doblado su volumen).
 
Pasado este tiempo, ponemos la masa sobre la mesa y amasamos ligeramente para quitarle el aire. Aplastamos un poco con las manos y la cortamos en 10 trozos más o menos iguales. Con cada trozo de masa formamos un churro de unos 15 cm. y unimos sus extremos, como si estuviéramos haciendo rosquillas.
 
Colocamos los bagels en la bandeja del horno, sobre papel antiadherente, tapamos con un paño limpios y dejamos reposar durante otra hora más.
 
Pasado este tiempo, ponemos al fuego una olla amplia con agua hasta que hierva. Escalfamos nuestros bagels de tres en tres, dejándolos un minuto por cada lado. Retiramos con ayuda de la espumadera y los colocamos sobre un paño limpio para eliminar el exceso de agua.
 
Volvemos a poner los bagels ya escalfados sobre la bandeja del horno, pintamos con huevo batido y espolvoreamos con semillas o hierbas al gusto. Metemos al horno precalentado a 220ºC durante 25-30 minutos. Retiramos y dejamos enfriar un poco antes de rellenar, ya sea con dulce o salado.